Con el frío, se dispara el consumo energético en los hogares
La bajada de temperaturas con la que nos ha sorprendido el mes de noviembre ha obligado a la mayoría a encender la calefacción.
Un consumo energético responsable resulta doblemente positivo, pues beneficiará tanto al medio ambiente como a nuestros bolsillos. Pequeñas acciones y hábitos en el uso de la calefacción permiten importantes ahorros y logran hogares sostenibles, sin perder confortabilidad.
Para el ahorro en la calefacción es importante considerar tres aspectos: el aislamiento, los equipos y el buen uso o buenas prácticas. Estos tres pilares son fundamentales y todos deben tenerse en consideración.
En cuanto al aislamiento, resulta verdaderamente importante evitar las rendijas en las ventanas y las puertas; los burletes adhesivos se convierten en soluciones económicas a estos problemas. En lo que respecta a los equipos, un adecuado mantenimiento de las calderas y la purga de los radiadores permiten un funcionamiento más eficiente.
No obstante, a pesar de disponer de un buen aislamiento de la vivienda y de unos equipos e instalaciones en perfectas condiciones, si no hacemos un uso responsable de la calefacción el consumo se puede disparar.
SENCILLAS PRÁCTICAS PARA UN USO RESPONSABLE DE LA CALEFACCIÓN:
1. Regula la temperatura, no debe superar los 21ºC durante el día y 17ºC durante la noche.
2. Cuando ventiles las estancias, 10 minutos son suficientes.
3. Deja los radiadores libres, no obstruyas la circulación de calor.
4. Aprovecha las persianas, bájalas durante la noche para que actúen de aislamiento.